Los juegos del hambre (pelicula)

Hace no mucho tiempo , cuando abri este blog , mi amiga Maria ya era una experta en estos lares. Comentando al respecto , surgio la idea de una colaboracion,solo faltaba encontrar el tema perfecto y sin buscarlo surgio. Maria se encuentra actualmente estudiando en Estados Unidos , por lo que pudo ver la adaptacion cinematografica de "Los juegos del hambre" en su estreno en dicho pais, asi que le pedi que me hicera una reseña de la pelicula y su opinion al respecto.
Creo que os encantara el resultado , a mi por lo menos me ha encantado.
Ahora solo me queda dejarosla para que la disfruteis.( Si os interesa conocer las reflexiones de Maria, aqui esta la dire de su blog, http://cuandomepongoaescribir.blogspot.com.es/)

Los Juegos del Hambre:

Título original: The Hunger Games

Autora: Suzanne Collins

Fecha de publicación: 2008 en EEUU y 2009 en España.

Secuelas: En llamas (2009) y Sinsajo (2010).

Fecha de estreno de la película: marzo del 2012 en EEUU y abril del 2012 en España.

Los Juegos del Hambre es el primer libro de la trilogía homónima.

La primera vez que oí hablar de este libro fue en alguno de los múltiples blogs sobre lectura que visito de cuando en cuando. Leí rápidamente la reseña, y no le hice mucho caso, pues parecía que al bloguero en cuestión no le gustó demasiado. Esa misma semana, en uno de mis muchos viajes a Valladolid con la obligada visita a La Casa del Libro, me encontré un ejemplar de esta novela, que me sonaba de ya no sabía qué (sí, mi memoria es asombrosamente corta para algunas cosas). Allí estaba, al fondo a la derecha en el piso de abajo. Así que por curiosidad eché un vistazo a la trasera, a ver de qué iba la cosa, y en seguida me vino uno de los dependientes a decirme que si buscaba la tercera parte la tenían en el almacén, que me la podía preparar en un momento. Ahí me dije yo, “hmm, trilogía, como a mí me gusta”. Así que me rasqué un poco el bolsillo (pues ya me llevaba Skeleton Creek y el tercer tomo de Memorias de Idhún), y me fui para casa más feliz que una perdiz con todas mis nuevas adquisiciones. Esa misma noche me terminé el libro que estaba leyendo y al día siguiente, en el tren, no me quedó más remedio que empezar Los Juegos del Hambre (Memorias de Idhún era para mi hermanilla, y Skeleton Creek hay que leerlo cerca de un ordenador con internet, pues tiene trozos de historia online). Pues bien, en la primera hora de trayecto  leí poco, mal y despacio, y no conseguí engancharme a la historia… al final opté por ponerme música y echar un sueñecito, y pospuse indefinidamente la lectura de esta novela (todavía no sé cómo pudo no engancharme). Y diréis, “¿pero para qué nos suelta toda esta historia en vez de hablar sobre la peli y ya está?”. Bueno, pues lo cuento para que no os desaniméis si empezáis a leerlo y no os engancha en la primera página… que puede pasar.

La segunda vez que cogí el libro fue justo antes de un viaje hacia León. Cogí lo primero que pillé, y al bus. En esa segunda vez, Dios sabe por qué, me enamoré de la historia desde la primera página. El argumento empieza más o menos sencillo, pero aquello va creciendo y durante toda la saga se convierte en algo fascinante, y bastante intrincado. Para situarnos, la trama transcurre en un futuro un tanto lejano (dentro de dos o tres siglos) con una configuración social bien distinta a la actual.

Yo creo que bien merece la pena dedicar un ratillo a describir la sociedad en la que sucede la historia, pues necesitamos conocerla bien y entenderla para poder ir comprendiendo los comportamientos de los distintos protagonistas. Anteriormente al comienzo de la historia, el mundo se ha visto inmerso en una gran guerra mundial autodestructiva que acabó en lo que parece un solo país, de nombre Panem (cómo no, en lo que ahora mismo son los Estados Unidos). Panem está dividido en 12 distritos y el Capitolio. En este último, se encuentra el gobierno (opresor y represor) y la gente “libre”, amantes de la moda, la estética, y los grandes festejos; la viva imagen del lujo y el consumismo. En cada uno de los distritos se producen diferentes materias primas que van directamente para disfrute del Capitolio. Es el hogar de familias más humildes, en algunos casos altamente deprivadas. En general, los distritos están numerados según la cercanía al Capitolio y el valor de los materiales que producen. Así los primeros son mucho más ricos y viven mucho mejor que los últimos. Bien, como decía, 12 distritos y el Capitolio; pero el libro nos cuenta como al principio eran 13 distritos. En algún momento del pasado la población de los distritos de Panem se levantó contra el Capitolio, encontrándose la principal fuerza de la revolución en este distrito trece. Para controlar la revuelta, el Capitolio se vio obligado a bombardear y destruir el Distrito 13. Después de su desaparición (con bastante silencio mediático), el Capitolio establece un evento anual llamado “Los Juegos del Hambre”. Se trata de una forma de vasallaje para que los habitantes de los distritos no olviden de dónde viene el poder.

Para cada edición de estos juegos se crea una gran arena con diferentes escenarios, todos plagados de innumerables peligros (fuego, agua, animales,… y toda la variedad de salvajadas que nos podamos imaginar). Los participantes de estos juegos son (según el Capitolio) “gloriosamente” seleccionados de entre los distritos. Un niño y una niña de cada distrito. Veinticuatro tributos en total, con edades comprendidas entre los 12 y los 18 años. De entre estos veinticuatro tributos solo uno puede ganar los juegos, el último que quede vivo. La forma de selección de los personajes no es menos llamativa. En los principales distritos los tributos  suelen presentarse voluntariamente después de toda una vida entrenando (y por tanto con grandes posibilidades de ganar). Estos suelen ser tributos sin ningún remordimiento ni conciencia, con buen dominio de diferentes armas y habilidades de supervivencia. En el resto e distritos, los tributos se eligen por sorteo. El nombre de todos los niños en edad de participar se introduce en una urna, y una mano “inocente”  saca al elegido. Pero no todos los niños tienen las mismas posibilidades, pues pueden pedir una tesela adicional (sistema de racionamiento que cambian por aceite y cereales) a cambio de introducir su nombre una vez más en la urna. Así que los niños de las familias más oprimidas tienen más posibilidades de salir elegidos. Por si esto ya parecía poca crueldad, los juegos son retransmitidos cual reality show por TV en todos los distritos y seguidos por una ingente cantidad de “fans” desde el Capitolio.

La historia empieza con dos jóvenes del distrito 12, Katniss Everdeen y Gale Hawthorne, cazando juntos en una zona prohibida y despotricando contra el sistema (con mucha razón) y contra los juegos, que están a punto de celebrarse. Un poco más tarde, en el sorteo de ese año, la hermanita de Katniss sale elegida y ella se presenta voluntaria para sustituirla. El tributo masculino es Peeta Mellark. La novela va entrelazando la historia de Katniss y Peeta en la arena con la descripción de la sociedad en la que viven. Mucha crítica y mucha acción. Para el resto de la historia, ¡a leerse el libro se ha dicho!

Como dije antes, al principio me costó un pelín engancharme, pero en cuanto tienes en mente la forma de la sociedad y vas entendiendo la forma de actuar de cada uno… uff, se lee en un suspiro. Es de esos libros que con tiempo y sin sueño te pueden durar solo una noche. Lo recomiendo altamente. Además de una historia de las que dejan poso, toda la organización detrás de ella nos puede hacer reflexionar bastante sobre hacia dónde estamos yendo, que falta nos hace.

Peeta Mellark, Katniss Everdeen y Gale Hawthorne

Sobre la película… solo puedo decir que tenía unas expectativas altísimas y no me decepcionó. Si es verdad que igual es obligatorio leerse el libro antes de verla, porque si no vas a estar un poco perdido, pero si ya estás enamorado de la historia, probablemente la película te guste también. Le faltan cosas, como a todas las adaptaciones, pero creo que han hecho un buen trabajo de selección, sobre todo teniendo en cuenta el volumen de información que hay en el libro. Lo mejor de toda la película, en mi opinión, es la actuación. Y no podría decir de quién. Prácticamente la totalidad de los actores están sublimes. La historia está llena de sentimientos (nada empalagosos, lo que se agradece) y estos actores han sido muy capaces de transmitirlos.

Mi escena favorita, que creo que no cambiará por muchas veces que vea la película, es ya en los juegos, cuando Katniss, después de perder a una compañera y realmente llena de rabia, se gira hacia una de las cámaras y hace el saludo del distrito 12 frente a ella, provocando una revuelta en el distrito 10, que lo están observando en directo. (A pesar de hay un mini fallo de adaptación ya que este saludo según el libro se hace con la mano izquierda).

Katniss haciendo el saludo del Distrito 12.

Y ya para acabar… mis personajes favoritos en la adaptación. A pesar de no tener grandes papeles, creo que hacen la película aún más grande.

Haymitch Abernathy. Participante de distrito 12 y ganador de los 50º Juegos del Hambre, lo que le dejó bastante tocado. Es borde, borracho, y aparentemente pasota en su papel de “tutor y guía” de Katniss y Peeta. Woody Harrelson encarna a un Haymitch mucho más atractivo de lo que yo imaginaba, pero a la larga, quasiperfecto.

Caesar Flickerman. Presentador de Los Juegos del Hambre. Representa el estereotipo de ciudadano del Capitolio. Extravagante e histriónico, preocupado por la estética y por el exterior, sensibilidad cero. El actor, al que adoro desde hace tiempo, es Stanley Tucci, que vuelve a deleitarme con su trabajo.

Cinna. Es el estilista de Katniss. A pesar de ser un ciudadano del Capitolio, parece ser de los pocos que entienden el significado de los juegos y la crueldad que suponen. Es un gran apoyo para Katniss y, de alguna manera, una esperanza. Interpretado por Lenny Kravitz.

Disfrutad del libro y de la película. Si lo hacéis, buscad las otras dos partes (“En llamas” y “Sinsajo”).

And… may the odds be EVER in your favor.